La terapia regresiva es una herramienta que nos ayuda a conectar con nuestro inconsciente para mejorar nuestro presente.
Se trata de una terapia muy efectiva para resolver traumas, bloqueos emocionales, miedos o fobias, y otros tantos problemas a los que nos enfrentamos en la vida.
Regresamos al origen de nuestro bloqueo emocional para liberar la energía atrapada tras un hecho traumático y descubrir las creencias limitantes que surgieron en ese momento; y que seguimos repitiendo de manera inconsciente.
¿Cómo conectamos con el origen de lo sucedido?
Por medio de una relajación profunda o hipnosis, ayudamos a la persona a entrar en un estado ampliado de consciencia gracias al cual revive las «situaciones bloquedas» en su mente. Hechos que pudieron causar un impacto emocional y están provocando comportamientos limitantes.
Revivir el trauma es esencial para desactivar de nuestro cuerpo las memorias ancladas y por tanto llegar a la sanación física.
Conectamos también con la emoción, que suele llevar mucho tiempo reprimida, dándole un espacio de liberación, y esto nos llevará a una sanación emocional.
Y por último tomar conciencia de manera profunda y comprender los patrones de conducta que quedaron en el subconsciente, nos lleva a la sanación mental. Sustituiremos esas creencias limitantes por otras expansivas o sanadoras. Que nos ayuden a crear la realidad que realmente queremos vivir.
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